Cuando las familias de educación infantil vienen a informarse para matricular a sus hijos en el centro y les explicamos nuestro proyecto educativo, siempre les sorprende, casi les asusta, uno de los objetivos que pretendemos: educar para la libertad. De alguna manera, les hacemos ver que el objetivo final del proceso educativo es conseguir personas que, de forma autónoma y libre, actúen de manera íntegra y responsable con la sociedad. Si tuviéramos que establecer una clasificación de las competencias educativas que los alumnos necesitarán en su vida adulta, seguro que mayoritariament…
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