Museo como espacio mágico y espacio aburrido, centro para la ensoñación y el aprendizaje, para el bostezo y la repetición… ¿Podría ser ésta la dicotomía en la que se encuentran inmersos actualmente los museos? La exageración de la pregunta posiblemente nos obligue a afirmar que, realmente, esta situación no puede generalizarse, que existe una amplia gama de grises en la cual ubicar la gran variedad de realidades en las que actualmente se encuentra la institución museística, considerada desde su vertiente educativa.
El camino recorrido es, sin lugar a dudas, largo y repleto de …