Desde nuestra experiencia en las escuelas infantiles de la Comunidad de Madrid, sabemos que la clase de los bebés es un remanso de paz dentro del día a día vertiginoso del centro. Educadoras y bebés pasamos muchas horas juntos y contentos.
Un curso entero, su primer año de vida. Un año lleno de rápidos cambios, lleno de cosas por descubrir, lleno de besos que sentir.
Por eso, nuestro propósito es claro: ayudar, acompañar y estimular a cada uno de los niños y niñas durante este año tan fundamental. Pero de nada serviría nuestro afán si no estuviera impregnado de un cariño de ver…