Hace unos años atrás, allá por 1987, llegué a la isla de Gran Canaria, recién licenciado del, por entonces, Instituto Nacional de Educación Física de Granada (actual Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte). Mi trabajo en un instituto de Las Palmas, me permitió conocer diferentes parques, playas y descampados donde impartir mi actividad docente, pues en aquella época este centro educativo, situado en pleno centro de la capital, carecía de instalaciones deportivas y nos veíamos obligados a buscar espacios alternativos donde dar nuestras clases. De esta forma, a …