Cuando pensamos en el aprendizaje musical de los jóvenes, normalmente viene a nuestra mente la escuela. Eventualmente, tenemos en cuenta otros contextos tales como las escuelas de música, los centros culturales o los auditorios. Y tan solo en contadas ocasiones tomamos en consideración el inmenso caudal de aprendizajes que los jóvenes adquieren a diario, mientras realizan actividades que pocas veces se estiman como “educativas”. La idea más o menos generalizada de que el aprendizaje musical es el resultado de un proceso metódico que solamente puede tener lugar en contextos formales im…
Contenido solo disponible para suscriptores
Accede a este artículo individual por solo
20.63S/ IVA incluido
Descubre todo nuestro contenido sin límites
Desde 40.49S/ IVA incluido
¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión