Una realidad a debate
Aunque no sea de forma explícita, parece como si en los centros educativos se siguiera un cierto principio según el cual, a medida que los niños y niñas se van haciendo mayores y acceden a niveles superiores, las familias acuden menos a las reuniones y actividades organizadas por éstos, y los docentes se muestran menos disponibles a mantener abiertos los canales habituales de relación compartida. Es algo visible, que ocurre en la vida cotidiana de las escuelas y de los institutos, y que emerge significativamente en los extremos del sistema: el mayor abanico e inte…