Es en la definición más precisa de los aspectos que deben componer el enfoque competencial donde este libro aspira a hacer alguna aportación, especialmente en los aspectos relativos a habilidades (sociales, comunicativas, emocionales, participativas, críticas) y nuevos valores como los derivados del principio de desarrollo sostenible.
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Es en la definición más precisa de los aspectos que deben componer el enfoque competencial donde este libro aspira a hacer alguna aportación, especialmente en los aspectos relativos a habilidades (sociales, comunicativas, emocionales, participativas, críticas) y nuevos valores como los derivados del principio de desarrollo sostenible.
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Introducción
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La formación ciudadana requiere la adquisición de una cultura democrática
El aprendizaje de la cultura democrática comprende la adquisición de una cultura democrática que implique un conocimiento suficiente del sistema en todas sus dimensiones. Es necesario conocer en profundidad las características y mecanismos de la vida social y política en un estado democrático (estado de derecho, separación de poderes, elecciones, ordenación legal, deberes y derechos...), su origen y evolución, de modo que pueda tomar parte en ellos de forma informada, responsable y eficaz, para ello deben formar parte del currículo en todos los niveles; educación infantil, educación primaria, educación secundaria y bachillerato, como se concreta en este capítulo.
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La educación ciudadana requiere la adquisición de habilidades emocionales
El aprendizaje de habilidades emocionales, entendidas como parte del desarrollo integral del individuo, son la base sobre la que se desarrollan las habilidades comunicativas y sociales que posibilitan el ejercicio responsable de la ciudadanía democrática. El plano emocional es uno de los factores esenciales del desarrollo integral del individuo y del establecimiento de relaciones saludables con los demás y, por lo tanto, del aprendizaje social y, en última instancia, de la ciudadanía. No puede haber ciudadanos responsables y participativos sin personas completa y equilibradamente desarrolladas, de modo que se produzca un progreso desde lo personal a lo social y desde lo social a lo ciudadano. El capítulo incluye propuestas prácticas para educación infantil, educación primaria y educación secundaria.
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La educación ciudadana requiere la adquisición de habilidades comunicativas
El aprendizaje de la ciudadanía democrática requiere de la adquisición de habilidades comunicativas que posibiliten los procesos participativos y que articulen las habilidades grupales y emocionales. Asimismo, las relaciones sociales se construyen fundamentalmente en torno a interacciones comunicativas que necesitan de habilidades que se desarrollan a nivel no verbal, paraverbal y verbal, por lo que pueden y deben enseñarse y aprenderse. En ese sentido, este capítulo ofrece la explicación sobre los componentes de las habilidades comunicativas no verbales, la dimensión paraverbal y la verbal y conversacional. Para terminar, pone de manifiesto la importancia del entrenamiento en habilidades integrado con el trabajo académico a través del pequeño grupo.
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La educación ciudadana requiere la adquisición de habilidades grupales
El aprendizaje de la ciudadanía democrática requiere la adquisición de habilidades grupales, que permitan articular las habilidades emocionales y comunicativas en entornos de participación cada vez más amplios. Cualquier grupo humano deberá tomar decisiones, resolver conflictos, colaborar, dotarse de una organización, etc., aspectos todos ellos susceptibles de ser aprendidos en una dimensión democrática. El pequeño grupo cooperativo-colaborativo será el laboratorio ideal de aprendizaje en todo el período educativo obligatorio a la vez que se va progresando hacia espacios sociales más amplios. El capítulo incluye un apartado final que proporciona pautas para el trabajo grupal (autoorganización, toma de decisiones, mediación en la resolución de conflictos, etc.).
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La educación ciudadana requiere la adquisición de habilidades críticas
El aprendizaje de la ciudadanía democrática requiere el desarrollo de la capacidad para analizar la realidad, elaborar un juicio razonado y asumir una postura en consecuencia que permita una participación fundada y responsable. Además, el desarrollo de habilidades del pensamiento crítico fortalece y dota al estudiante de destrezas, a la vez que lo prepara para asumir los retos que impone la realidad cambiante y diversa de la que forma parte. En ese sentido, este capítulo trata sobre el desarrollo de la habilidad crítica y del pensamiento crítico en el currículo en las etapas de educación infantil, educación primaria y educación secundaria obligatoria.
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La educación ciudadana solo se adquiere a través de la participación democrática
El aprendizaje de la ciudadanía democrática está indisolublemente ligado a la participación efectiva en las instituciones sociales y educativas, en ámbitos progresivamente más amplios y de mayor responsabilidad. Es imprescindible que el aprendizaje de la ciudadanía esté basado en la experiencia personal y grupal. De los contrario, carecerá de una interiorización apropiada que lo convierta en parte del carácter del futuro ciudadano que será. Esta experiencia deberá adquirirse desde el primer momento en el contexto escolar mediante el ejercicio de una democracia real en los centros escolares en todos los niveles, de una manera proporcional a su edad y capacidad pero efectiva, que implique derechos y deberes y tenga un impacto en la vida escolar. Para terminar, el autor ofrece algunas ideas para fomentar la participación en la práctica.
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La educación ciudadana tiene como referencias universales los valores domocráticos y los derivados de la sostenibilidad y los derechos humanos
Este capítulo aborda los valores objeto de la educación ciudadana tomando como referencia la Educación para el Desarrollo Sostenible (EDS) para una educación en valores, la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) como marco de referencia actual, el Compromiso de la Unión Europea con los ODS y las referencias curriculares en España. Para terminar, se proponen una serie de prácticas educativas para educación infantil, educación primaria y educación secundaria, concretando los valores a desarrollar con la finalidad de aprender a conocerse, aprender a hacer, aprender a vivir juntos y aprender a ser.
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La educación ciudadana se transmite mediante un enfoque didáctico interdisciplinar y globalizado
La ciudadanía debe enseñarse desde planteamientos metodológicos globalizados e interdisciplinares. La necesidad de integrar los planteamientos de la educación ciudadana en el conjunto de la vida escolar solo se puede llevar a cabo a través de planteamientos metodológicos globalizados e interdisciplinares, como por ejemplo, los basados en la indagación (aprendizaje por problemas, proyectos o estudio de casos). Estos enfoques ofrecen muchos otros beneficios en cuanto a motivación o integración de los conocimientos en la realidad. No obstante, el tratamiento curricular debería incluir espacios y tiempos específicos, es decir, asignaturas con carácter obligatorio a lo largo de toda la etapa educativa. Para terminar, se describen las fases que se deben de llevar a cabo en la práctica al proponer algunas metodologías para el aprendizaje.
