Este libro nos invita a los educadores a descubrir el dolor infantil. Dice la autora que no sólo es pedagógicamente inaceptable eludir la relación niño/dolor, sino que resulta indispensable tratar las emociones del niño, entre ellas el dolor, no según cánones adultos sino desde la perspectiva infantil. Aquí encontraremos una serie de intervenciones, sugerencias e indicaciones útiles, no para seguirlas ciegamente sino para posibilitar un auténtico proceso de educación en los sentimientos, empezando por los más complejos como el dolor en sus diversas facetas.
Este libro nos invita a los educadores a descubrir el dolor infantil. Dice la autora que no sólo es pedagógicamente inaceptable eludir la relación niño/dolor, sino que resulta indispensable tratar las emociones del niño, entre ellas el dolor, no según cánones adultos sino desde la perspectiva infantil. Aquí encontraremos una serie de intervenciones, sugerencias e indicaciones útiles, no para seguirlas ciegamente sino para posibilitar un auténtico proceso de educación en los sentimientos, empezando por los más complejos como el dolor en sus diversas facetas.